lunes, 25 de abril de 2016

Olivar de Los Algarrobos, Sorbas, Almería

Silencio...

A los que salimos al campo muchas veces nos impresiona el silencio, pues la tarde que visitamos estas oliveras "Olea europaea" fue una de esas veces.

Foto 1. Vista panorámica del Olivar de Los Algarrobos
El Libro de Apeo y Repartimiento de Sorbas, del siglo XVI, describe, parcela a parcela, cada uno de los parajes cultivados en el municipio tras la expulsión de los moriscos. Acebuches y lentiscos aparecen por todas partes, especialmente en el Campo o Campico de Hónor, hondonada llana de 100 o 200 hectáreas no muy lejos del río de Aguas, donde es evidente que los cultivos de secano se habían establecido en medio de un lentiscar. De "Almería hecha a mano: una historia ecológica" (García Latorre & García Latorre, 2007).
Por aquí andamos, concretamente junto a la rambla de Sorbas, donde encontramos este olivar que es singular en conjunto e individualmente, ya que al menos 5 de estas oliveras tienen troncos  cuyo perímetro supera los 5 metros.

Foto 2. La olivera más alta, casi 7 metros.

Son bastante altas, como podéis observar, en torno a 7 metros la de más altura. En sus troncos huecos, retorcidos, adivinamos la historia de esta tierra en la que la maquia fue sustituida en muchos casos por acebuches u olivos para poder sobrevivir a las necesidades y el hambre que han asolado en distintas épocas estas áridas tierras de Almería.

Foto 3.  Rebrotes basales que caso de dominar alguno  acabarán generando el nuevo olivo.

El paso del tiempo y las podas han dejado huella en todas ellas, así las talas ancestrales han provocado la muerte en repetidas ocasiones de la parte viva del tronco (albura), por lo que los árboles se han ahuecado, hasta tal punto que muchos casos el tronco se ha abierto al exterior. Fruto del desmoche  de los brazos principales han surgido una serie de rebrotes epicórmicos (fotos 2, 3 y 5) que constituyen la actual copa, dichas ramas pueden terminar por romper la estructura arbórea si se las deja crecer a su libre albedrío, ya que éstas aumentarán de peso y de tamaño (incremento del efecto vela ante el viento). Además, por lo general, una vez que un árbol es desmochado precisará para el resto de su vida recibir podas de mantenimiento, eso sí, éstas pueden estar mejor o peor aplicadas, dependiendo de la pericia y sabiduría del que las lleve a cabo. Si bien, hoy día, motosierra en mano, prácticamente cualquiera que sepa manejar un poco dicha máquina se pone a cortar aunque sus conocimientos sobre arboricultura no sean muy amplios.

Foto 4. Detalle de tronco completamente abierto al exterior.

Cada uno de los árboles que forman este relajante conjunto tiene sus particularidades, algunos con el paso del tiempo han perdido parte de sus troncos dejándonos ver a su través, no solo la historia sino también el resto del paisaje, en el que las trigueras, tomillos o bufalagas, entre otras, completan el cuadro.

Foto 5. Tronco abierto en 2 mitades, obsérvese en lado derecho derecho
 los grandes rebrotes que ahora constituyen la copa.

Sería una pena que pasara aquí como en otros lugares de España, Murcia entre ellos (Artículo: Olivicidio en Calasparra), donde se han arrancado para trasplantarlos en una redonda o simplemente hacer leña. Es por esto que hacemos desde aquí una llamada apoyando la recogida de firmas en www.change.org en contra del expolio de los viejos olivos y otros árboles centenarios. Nuestro amigo César Javier Palacios, promotor de la misma, nos cuenta desde su blog la "Crónica verde" 10 razones para que nos detengamos a pensar y entre todos podamos pararlo:
  1. Porque son los seres vivos más viejos de la Tierra. Muy pocas especies son capaces de tener más de 2.000 años y seguir fructificando como jovenzuelos.
  2. Porque son paisaje. Sin ellos perdemos la seña de identidad de lugares únicos donde estos viejos árboles han estado dando frutos a nuestros antepasados durante milenios.
  3. Porque son cultura. Una cultura tan milenaria como ellos mismos, de profundas raíces mediterráneas, asentada en el sabio manejo de ejemplares tan viejos como valiosos.
  4. Porque son biodiversidad. El árbol viejo es fundamental para dar cobijo a una cohorte impresionante de animales y plantas que sólo pueden vivir si ellos existen, desde el mochuelo a extraños escarabajos.
  5. Porque son turismo. Existe un turismo de arbolado singular. En muchas localidades se han convertido en su principal atractivo turístico. Vivos dan mucho dinero. Muertos o en una rotonda tan sólo dan lástima.
  6. Porque no es un rescate. Es la justificación que dan quienes los arrancan y venden, pero es falso. Los quitan para ganar dinero, nunca para darles una segunda oportunidad.
  7. Porque la mayoría muere. Para que uno solo de estos ejemplares grandiosos llegue a un jardín, rotonda o campo de golf, han muerto decenas por el camino.
  8. Porque es pura especulación. Los intermediarios los compran por cuatro perras a los agricultores y los acaban vendiendo por cantidades fabulosas a ricachones caprichosos o alcaldes con escasas luces.
  9. Porque es peligroso. En el traslado, junto con él árbol van polizones no deseados dentro del cepellón o entre las ramas y tronco que pueden provocar plagas, enfermedades o la entrada de especies invasoras.
  10. Porque es una atrocidad. Hace un siglo vendíamos a los americanos nuestras iglesias románicas, que se llevaron por decenas piedra a piedra, aduciendo que también lo hacían para salvarlas de la ruina. Hoy hacemos lo mismo con nuestras catedrales verdes.
Foto 6. Dejamos las oliveras y vamos a firmar la petición aquí, para que cuando volvamos a ellas sigan en su lugar. ;-)


FICHA BÁSICA

Especie
Olea europaea
Nombre común
Olivera, olivo
Nombre propio
Oliveras de los Algarrobos
Término municipal
Sorbas
Provincia
Almería
Altitud
440 msnm
Perímetro
De 4 a 7,15 m.
Altura
De 5 a 7 m
Edad aproximada
 1.000 -1.200 años
Estado de conservación
Regular
Amenazas
Si
Estatus legal
--
Plan de actuación definido
--



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